Este período de alejamiento físico de la escuela nos ha mostrado algo que ya sabíamos, pero que queremos enfatizar: la escuela no está solo en los libros o en los edificios, está también en todos aquellos lugares donde se aprende: en el cine, en las novelas, en las redes sociales, en la investigación, en la observación… La escuela que viene parte de que el lugar, los lugares, donde se produce el aprendizaje deben ser compartidos.